“Si hacemos un pacto con la DC de llevar un candidato común a las primarias ahora, el problema de las diferencias programáticas se oscurecen”, estimó el parlamentario.
El Jefe de la bancada de diputados del PS, Marcelo Schilling, expresó que “el acuerdo demócrata cristiano-socialista tiene como propósito fundamental darle gobernabilidad a Chile y entregarle estabilidad social y política al país con un programa, un gobierno y una fuerza parlamentaria y municipal. El acuerdo no tiene por finalidad definir a un candidato a Presidente de la República común para las primarias”. De esta manera, el Diputado Socialista cuestionó el reciente acuerdo que él llama solamente “acuerdo Walker-Andrade”, haciendo una diferencia con el pacto estratégico entre la DC y su tienda.
El parlamentario socialista advirtió que «existe una diferencia entre los que creen que se reduce a eso y los que piensan como yo, que el entendimiento PS –DC es una necesidad estratégica para el desarrollo del país. Sobre el acuerdo Walker-Andrade, estoy en desacuerdo porque creo que lo que corresponde ahora es permitir que florezcan mil flores, que haya todas las candidaturas presidenciales que se quieran levantar, porque éstas tienen las siguientes virtudes: primeramente, van a poder organizar a los actores sociales con los vínculos de la política y, en segundo lugar, permitirán formular propuestas programáticas que interpreten a los actores sociales. Su síntesis va a ser zanjada democráticamente en una elección primaria por el liderazgo de la coalición, el que le pondrá su sello al programa», señaló el Diputado.
Finalmente, el legislador socialista indicó que «si nosotros hacemos un pacto con la DC sólo para llevar un candidato común a las primarias ahora, el problema de las diferencias programáticas que tenemos con la DC, se oscurece y desaparece completamente. Yo soy amigo de muchos demócrata cristianos -me junto con ellos los jueves-, pero en la DC hay un fuerte componente conservador y el componente de avanzada social tiene que ganar para responder al nuevo Chile, y eso se logra en una elección. El PS tiene que llevar a su abanderada, con su programa, porque es la única manera de mantener la unidad con la Democracia Cristiana y a la vez imponer amistosamente la hegemonía de lo que los socialistas creemos que es justo y necesario para el país», escatimó Schilling.
