63 cápsulas de ovoides eran transportadas por un burrero boliviano.
Mientras realizaban un control terrestre para erradicar el tráfico de drogas, detectives de la Brigada Antinarcóticos de La Calera revisaron un bus interprovincial proveniente de Iquique, donde descubrieron que un pasajero de nacionalidad boliviana era portador de cuerpos extraños en su abdomen, situación que se corroboró tras el examen radiológico al que fue sometido en el hospital público de la comuna.
El imputado, iniciales C.M.N., de 38 años de edad, oriundo de Cochabamba, transportaba 63 ovoides de pasta base en su abdomen. Tras la completa evacuación de las cápsulas, la droga arrojó un peso bruto de 771 gramos, que corresponden a 11 mil 565 dosis, avaluadas en el comercio informal en 11 millones y medio de pesos.
De acuerdo a la investigación policial, el detenido se dirigía a la Región Metropolitana y, según su propio relato, recibiría la suma de 800 dólares al momento de concretar la entrega.